Y, tras dieciocho meses, ya hemos terminado la primera temporada de esta nueva era de cómics, que buscaban rellenar los huecos entre el reboot que tuvo lugar en 2013 y su secuela, Rise of the Tomb Raider, que llegará en exclusiva para Xbox One a finales de este año.
Tomb Raider Arco 1: Season of the Witch
Tras los eventos del reboot, a Lara le cuesta conciliar el sueño. El síndrome del superviviente le hace ver a los amigos que perdió en Yamatai. Pero todo se tuerce cuando Sam comienza a comportarse de manera extraña. Lara será contactada por el resto de supervivientes. La sensación de que están siendo perseguidos por algo que son incapaces de comprender…
Con este arco argumental arranca una nueva etapa en los cómics de Tomb Raider y, como todo comienzo, es difícil. Estos cómics fueron planificados como un tie-in, un añadido que busca ampliar más allá de los juegos el trasfondo de los personajes y se nota perfectamente porque es una historia que tiene un comienzo, un final, pero que no ha avanzado propiamente en el desarrollo del personaje.
También se le puede poner como falta (y podría considerarse grave) el hecho de que Sam vuelve a ser la dama en peligro que Lara ha de rescatar, y que Dan Abbnet reutiliza en Los Diez Mil Inmortales, aunque con mas acierto, todo hay que decirlo.
El dibujo y el uso del color, si bien he de reconocer que no soy un experto, me parece un poco pobre. Y aunque Nicolas Daniel Selma hace un buen trabajo siguiendo su estilo de dibujo, su estilo choca frontalmente a lo que estábamos acostumbrados previamente: dibujos mas sobrios, directos al grano, en comparación con los dibujos cargados de detalles de tomos de la era de Top Cow. El color, obra de Michael Atiyeh, prácticamente plano, no demasiado vibrante. El conjunto visual, a mi gusto, deja bastante que desear.
En general, por tanto, un comienzo duro, ligeramente flojo, para una nueva etapa de comics.
Tomb Raider Arco 2: Secretos y Mentiras
Tras los eventos del primer arco, Lara se va junto a Reyes a honrar la memoria de Roth, pero tiene una alucinación en la que Alex le pide que rescate a su hermana Kaz.
Este segundo arco nos deja entrever un poco el futuro al que se dirige la historia. Trinity es la amenaza principal del arco, con Cruz como la cabeza visible de dicha amenaza. El argumento de la entrega gana varios puntos respecto al primer arco, aunque la trama de Jonah y la obra de teatro se nota que fue añadida como relleno. Fue un bonito detalle añadir flashbacks de la joven Lara junto a Roth que muestran la relación tan cercana que tenían el y Lara.
En cuanto al dibujo, este arco ha contado con dos dibujantes, por lo que el trabajo en lo respectivo a este apartado es desigual, siendo, bajo mi opinión, el mayor pero de este arco. Por un lado, los primeros números de este arco fueron dibujados por Derlis Santacruz, cuyos trazos cargados de detalles producen unas ilustraciones llenas de vida a un nivel muy similar a los comics clásicos de Top Cow. Por otro lado, los últimos números son dibujados por Nicolás Daniel Selma, que se mantiene fiel a su estilo, aunque bajo mi punto de vista, aumenta un poco el detalle de sus trazos, mejorando lo visto en el primer arco.
Tomb Raider Arco 3: La Reina de las Serpientes
Tras recibir un vídeo de un amigo secuestrado, Lara, Sam, Jonah y Kaz se lanzan a una aventura que lo cambiará todo.
Y llegamos al tercer y último arco de esta temporada y el mejor de todos ellos, bajo mi punto de vista. Rhianna Pratchett toma las riendas del guión del arco con Derlis Santacruz como dibujante único, eliminando el handicap del arco anterior.
Este arco hará las delicias de muchos fans de la Lara clásica pues muchas características y elementos comienzan a hacer acto de presencia, siendo la entrega final el gran detonante de Rise of the Tomb Raider y de una Lara que, de mantenerse en el juego, todo apunta a una mayor aceptación de esta nueva Lara.
Y hasta aquí esta primera temporada de cómics, aunque próximamente arrancará una nueva tanda, con la Lara clásica, con Lara Croft and the Frozen Omen.